CEREMONIA

Hay parejas que optan por incluir otros elementos significativos en la celebración como la Entrega de la Novia, las Velas, las Flores a la Virgen, el Lazo o Rosario, el Intercambio de las Madres.

Al llegar la novia al altar del brazo del padrino, lo acostumbrado es que éste la bese en la frente y le de la mano al novio diciéndole unas palabras sencillas, pero cargadas de emoción. Con esto se realiza la Entrega de la Novia.

Antes de realizar el consentimiento podemos encender dos velas separadas y dejar una más grande en el medio apagada. Cuando concluyamos el consentimiento, nos acercamos juntos y con las velas encendidas previamente encendemos la colocada en el centro, simbolizando que llegamos separados y nos vamos unidos, convertidos en una sola persona.

Igual simbolismo tiene el Lazo o el Rosario. Este se coloca sobre los hombros del novio y de la novia dejando la cruz pendiente entre ambos. Tanto el Lazo como el Rosario son colocados por unas personas muy queridas y cercanas a los novios, como tías, abuelas o madres.

Las novias acostumbran ofrecerle a La Virgen un ramo de flores como símbolo de virginidad y como veneración a La Madre. Es la Dama de Honor la persona que  se encarga de alcanzarnos este ramo en el momento oportuno.

Otro simbolismo que puede emplearse, es que después de La Paz, las madres de los novios se intercambien de asientos, indicando así que las familias se han mezclado, son ahora una sola.