SERVICIOS - BELLEZA Y SALUD

La depilación es la eliminación de los vellos de la piel, dejándola suave y sedosa. Hay muchos métodos y para elegir el apropiado para nosotras debemos tener en cuenta la sensibilidad de nuestra piel, nuestra tolerancia al dolor, las características de nuestros vellos (cantidad y grosor), los costos y los beneficios de cada uno.

Se recomienda que primeramente preparemos el área a depilar con una exfoliación suave y después mantengamos constantemente la piel humectada. Si vamos a un salón de belleza, asegurémonos que la persona que nos atenderá tenga la experiencia suficiente.

Existen varias opciones para depilarnos. Podemos usar la tradicional rasuradora, que es una opción rápida y sencilla, pero que irrita mucho la piel y hace que el vello salga de nuevo más grueso. Se recomienda emplearla siempre con espuma para afeitar y sólo en casos de emergencia o cuando tenemos pocos vellos. Otra forma rápida es el uso de las pinzas, aunque sólo sea útil para las cejas o para eliminar algunos vellos de la cara. Las cremas depiladoras son muy eficientes, pero requieren de una prueba para comprobar que no hagamos una reacción alérgica al producto. La opción más empleada, a pesar de que las primeras aplicaciones pueden ser algo dolorosas, es la cera fría o caliente. Otros métodos muy efectivos son la electrólisis y el láser. Ambos requieren de varias sesiones para obtener la depilación total y deben ser aplicados en un centro especializado y por un personal competente.

El día antes de la boda, no probemos productos o métodos nuevos porque no sabemos cómo va a reaccionar nuestra piel ante ellos.

Sea cual sea el método que escojamos, lo principal es que debemos depilarnos cuidadosamente para evitar irritarnos la piel y después ser consistentes en su aplicación.