LUNA DE MIEL

Después de un año de nuestra boda, podemos recordar ese momento de muchas maneras. Generalmente intercambiamos regalos, salimos a un elegante restaurante, hacemos una cena romántica, nos hacemos el día especial. Si tenemos la posibilidad y los recursos podemos irnos de “segunda luna de miel” y darnos juntos una escapadita a unas magníficas vacaciones.

Después de este primer año, para avivar la pasión y hacer que el amor permanezcan en el tiempo podemos buscar cualquier momento y justificar con cualquier pretexto para disfrutar de nuestra intimidad. Los hijos que vienen después a ocuparnos todo el tiempo, el trabajo y todas las responsabilidades que comienzan a abrumarnos no pueden impedirnos que de vez en cuando nos alejemos de todo y de todos y vivamos la fantasía de otra luna de miel aunque ésta sea de una noche, un fin de semana o si es posible algo más.

Indiscutiblemente cada año, en el aniversario del matrimonio tendremos un momento especial para festejar y la tradición le ha dado a cada uno un nombre específico, partiendo de la costumbre de que el esposo le entregaba anualmente a su esposa un regalo confeccionado del material que representaba el aniversario y lo mismo hacían los amigos y familiares.

1 año:    Bodas de Papel

2 años:   Bodas de Algodón

3 años:   Bodas de Cuero o Piel

4 años:   Bodas de Seda, Frutas o Flores

5 años:   Bodas de Madera

6 años:   Bodas de Hierro o Dulces

7 años:   Bodas de Cobre o Lana

8 años:   Bodas de Bronce

9 años:   Bodas de Barro, Loza o Cerámica

10 años: Bodas de Estaño, Lata o Aluminio

11 años: Bodas de Acero

12 años: Bodas de Lino, Hilo o Seda

13 años: Bodas de Encaje o Cordón

14 años: Bodas de Marfil

15 años: Bodas de Cristal

20 años: Bodas de Porcelana

25 años: Bodas de Plata

30 años: Bodas de Perla

35 años: Bodas de Coral o Jade

40 años: Bodas de Rubí

45 años: Bodas de Zafiro

50 años: Bodas de Oro

55 años: Bodas de Esmeralda

60 años: Bodas de Diamante

65 años: Bodas de Platino

75 años: Bodas de Brillante